BUENOS AIRES, 9 dic (Reuters) – Después de un partido sufrido contra Holanda, los argentinos cambiaron la ansiedad por el júbilo el viernes después de que una victoria reñida envió a su equipo a las semifinales en Qatar.
En un feriado nacional con temperaturas extremadamente altas, los aficionados argentinos se reunieron en casas, bares y plazas públicas para ver a su equipo, dirigido por la estrella Lionel Messi, vencer a Holanda 4-3 en la tanda de penales.
El martes, se enfrentarán a Croacia, que derrotó a Brasil el viernes, dejando a Argentina como el último equipo de las Américas en la contienda por convertirse en campeones del mundo.
«Tremenda locura, te juro que se me partió el corazón, no aguanté más», dijo un hincha en una plaza del barrio porteño de Palermo donde vio el partido en una pantalla gigante junto a unos 30.000 hinchas más.
Los argentinos mantienen la esperanza de que su equipo pueda ganar la tercera Copa del Mundo del país, luego de las victorias en 1978 en Argentina y 1986 en México, donde fueron dirigidos por el fallecido Diego Maradona.
«Pasó todo en el partido. Estaba feliz, nervioso, pero siempre animando al equipo», dijo un hincha en Palermo, donde los hinchas ondeaban banderas con la imagen de Messi y Maradona.
«Sufrimos, pero ganamos», dijo otro.
Información de Horacio Soria; Escrito por Lucila Sigal; Editado por Stephen Coates
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